jueves, 15 de noviembre de 2012

Domingo XXXIII del Tiempo Ordinario (B)



18-11-2012              DOMINGO XXXIII TIEMPO ORDINARIO (B)
Homilia de audio en MP3
Queridos hermanos:
            En el evangelio de hoy se nos habla de los últimos tiempos. Estamos ya terminando el año litúrgico B, el dedicado al evangelio según San Marcos, y estos textos se refieren al juicio final y a los últimos días. Pues bien, permitidme que os narre dos hechos, uno real y otro que bien puede serlo, y luego entramos ya en el meollo de la homilía:
            1) Este fin de semana pasado estuve en Covadonga en unos Cursillos de Cristiandad. Éramos 33 personas y estuvimos hablando de Dios, hablando con Dios, reflexionando sobre nuestra vida y pasándolo muy bien. Se nos dieron varias charlas. En ellas se nos explicaban cosas de la fe y al tiempo se nos daban también testimonios de vida. Por ejemplo, un chico comentó el siguiente episodio: Resulta que él está colaborando con un proyecto de Caritas parroquial en el que se apoya a niños y adolescentes en sus estudios dándoles clases para que suban el nivel de sus conocimientos. A estas clases van niños españoles, pero también otros niños, hijos de emigrantes, y que van más retrasados. Hay niños polacos, rumanos, de Hispanoamérica, marroquíes… Confluyen allí muy diversas culturas, modos de pensar, costumbres y religiones, y se procura tener el máximo respeto hacia todos ellos. Las clases se dan en los salones parroquiales, en donde hay posters con imágenes religiosas y crucifijos, que se usan para la catequesis. Pues bien, comentaba este chico que en cierta ocasión uno de los niños marroquíes, de unos 8 años de edad, empezó a decir (señalando para un crucifijo) que ‘menudo profeta’ teníamos los cristianos. Nuestro profeta era débil y no valía para nada, pues, al ser escupido y azotado, no había podido defenderse a sí mismo. El chico que le daba la clase le dijo que respetara la fe cristiana, lo mismo que todos los demás habían respetado la suya; pero el niño seguía insistiendo en faltar y atacar a la fe cristiana y a Cristo. El chico se dio cuenta que el niño no hablaba por sí mismo, sino que repetía lo que había oído en casa, y le dijo que, si fuera mayor, le respondería, pero, como era un niño, no era conveniente responderle por respeto. Entonces, otro marroquí de 12 años dijo: ‘Si nosotros fuéramos mayores, ¿qué nos responderías?’ Y ya el chico les dijo: ‘Si fuerais mayores os diría que, si yo estoy dando clase a todos estos niños y a vosotros mismos, se debe a ese profeta débil, escupido, azotado, asesinado y que no se ha podido ni querido defender a sí mismo. Si yo os doy clase, es porque ese profeta de burla me pide que perdone y que ame a mis enemigos y a los que no piensan como yo’. Entonces, los niños marroquíes se callaron y la clase pudo seguir sin más problemas.
            2) En una novela de José Luis Martín Descalzo sobre la Guerra civil española, se contiene un diálogo entre un teniente del ejército nacional y un sacerdote recién ordenado, que acaba de ser salvado de manos de los "ro­jos" por el teniente, cuando aquéllos iban a matarlo. El sacerdote trata ahora de salvar a los "rojos" que lo querían asesinar a él, que fueron hechos prisioneros por el teniente y sus soldados y que ahora éstos quieren fusilar por ser “rojos” y enemigos. En la tensa conversación que mantienen el teniente y el cura, aquél le dice a éste: “Usted parece creer que todas las ideologías son como la cristiana, en la que tú puedes creer en Dios y vivir como si no creyeras (pg. 226, de la novela Lobos, perros y corderos, Ediciones Destino, Colección áncora y delfín, volumen 529, Barcelona 1978).
            ¿A qué vienen estas dos historias, y qué tienen que ver con el evangelio que acabamos de escuchar? En el evangelio leímos: Entonces verán venir al Hijo del hombre sobre las nubes con gran poder y majestad. En efecto, los niños marroquíes y bastantes musulmanes tienen la convicción de que la fe cristiana es una religión de personas débiles, pues “nuestro profeta” se ha dejado pegar y asesinar sin oponer resistencia y, además, nos manda a sus discípulos poner la otra mejilla. Pero también es cierto que otros muchos cristianos, incluso ‘practicantes’ igualmente pueden tener esta visión de Jesús y de nuestro Dios. Consideran que Dios, en la práctica, es más un Abuelo que un Padre, que va a perdonar todo, que da lo mismo hacer poco mal/bien que mucho mal/bien, pues mientras ‘no robemos ni matemos’[1] no hay problema. Asimismo consideran, como el teniente de la novela, que en la ‘ideología’ cristiana se puede creer en Dios y vivir en la práctica como si no se creyera, es decir, se puede decir que se cree en Dios, pero echarse a la espalda sus mandamientos. En la Edad Media se representaba un Jesús terrible. Era el juez que veía todo lo malo y nos condenaba al infierno por menos de un pecado venial y ahora, sin embargo, nada es pecado, nadie hace nada malo, y Dios es medio tonto y medio ciego y, además, es el culpable de todos los males del mundo: de todos los robos, de todos los asesinatos, de todas las violaciones, de todas las muertes, de todas las hambres, de todos los terremotos, de todas las guerras…, porque, pudiendo evitarlas, no hace nada. Pero el evangelio es bien claro: al final de los tiempos, Jesús volverá a la tierra y vendrá “con gran poder y majestad.
            Pero ¿a qué va a venir Jesús? También nos lo dice el evangelio de hoy: Jesús enviará a los ángeles para reunir a sus elegidos de los cuatro vientos, de horizonte a horizonte. Y en la primera lectura dice: Entonces se salvará tu pueblo: todos los inscritos en el libro. Sí, Jesús va a venir con poder. Jesús va a venir a buscar a los suyos, a quienes le permanecieron fieles en medio de las dudas, de los miedos, de las debilidades, de las tentaciones, de los pecados, de los triunfos y de los fracasos terrenos… 
             En definitiva, nuestro ‘profeta’ puede parecer débil a otros o a nosotros mismos, pero no lo es. Es un Dios fuerte, grande, misericordioso, paciente, amoroso, justo, ante quien nada se le puede esconder ni nada le permanece oculto. Por eso, dice el Catecismo de la Iglesia Católica:
            - “Frente a Cristo, que es la Verdad, será puesta al desnudo definitivamente la verdad de la relación de cada hombre con Dios. El Juicio final revelará hasta sus últimas consecuencias lo que cada uno haya hecho de bien o haya dejado de hacer durante su vida terrena” (n. 1039).
            - “El Juicio final sucederá cuando vuelva Cristo glorioso […] Nosotros conoceremos el sentido último de toda la obra de la creación y de toda la economía de la salvación, y comprenderemos los caminos admirables por los que su Providencia habrá conducido todas las cosas a su fin último. El Juicio final revelará que la justicia de Dios triunfa de todas las injusticias cometidas por sus criaturas y que su amor es más fuerte que la muerte” (n. 1040).
            - Jesús hará un mundo nuevo, que se llamará Reino de Dios. En este ‘universo nuevo’ (Ap 21, 5), la Jerusalén celestial, Dios tendrá su morada entre los hombres. ‘Y enjugará toda lágrima de sus ojos, y no habrá ya muerte ni habrá llanto, ni gritos ni fatigas, porque el mundo viejo ha pasado’ (Ap 21, 4; cf. 21, 27) (n. 1044).


¡QUE ASI SEA!


[1] En estas mentalidades robar en la empresa, o en Mercadona, o en el prado del vecino, o a Hacienda, a los hermanos en la herencia… no es robar. Asesinar con el odio, el rencor que se siente hacia otras personas, el aborto… no es asesinar.

9 comentarios:

  1. Sólo he podido leer la homilía rapidamente, pero creo que es fantástica. Gracias. Menudos ejemplos tan estupendos.
    ¡¡Cuánto me atrae esa Jerusalén celestial!! ni lágrimas, ni llanto, ni fatigas....hay tanto de ésto a nuestro alrededor.
    Merece la pena trabajar en ese Reino de Dios, ya aquí y desde ahora, para conseguir el mundo nuevo, que llevamos todos inscrito en deseo, en el corazón.
    Volveré cuando vuelva a meditar la homilía.
    Y como diría Chony: ¡¡Bendito sea Dios!!

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  2. ¡Qué homilía la de hoy! Nos hablas del juicio final: es primordial, impresionante, muy clara y me invita hacer un alto en mi caminar y hacer balance de como estoy invirtiendo los talentos recibidos de parte del Señor.

    Andrés, haces referencia a los C. de C. que vivimos el fin de semana pasado en Covadonga. ¡Cómo desearía saber expresar todo lo que en esos días el buen Dios me regaló en aquella bendita casa! Todo me hablaba de Él, ha sido una experiencia única que nunca olvidaré. Todos y cada uno de los responsables que Dios puso a nuestro lado para que hicieran el camino con nosotros en esos tres días han sido una bendición constante de Aquél a quién representaban. No sólo en el momento de darnos las charlas, sino en los instantes en que me encontraba con ellos, su mirar estaba lleno de acogida y ternura que sólo aquellas personas llenas de Jesús saben transmitir.
    Ahora, con permiso de los demás responsables, quisiera decir la impresión que me causaron los “chicos” con sus gestos, sus mensajes y sus testimonios llenos de Dios y de Jesús, se me quedaron enganchados en lo más íntimo de mi ser. El caso es que la mayoría de las cosas que se me dijeron allí ya las había escuchado otras veces, pero en esos momentos me sentía atrapada de una forma distinta. Salí de Covadonga llena de Luz y de fortaleza y con muchas ganas de ir sacando lo que me sobra para llenarme del Señor.
    Muchísimas gracias a todos y que Dios os siga bendiciendo como hasta ahora.

    Los testimonios que nos pones me llenan de gozo, es muy estimulante el ver hermanos que dan la cara, en su momento, por nuestro Señor Jesús.

    En cuanto al juicio final, ese modo de hablar apocalíptico, es sobrecogedor, pero a pesar de todas estas dificultades, Dios quiere animar a sus hijos a que no se desesperen, que a pesar de todo sigan creyendo en Él, que esa situación no va a durar siempre.
    Confiamos en su misericordia, pero nuestro modo de vivir tiene mucha importancia. No es igual hacer el bien que hacer el mal. Ese día, al presentarnos ante Él, le presentaremos lo que ha sido nuestro modo de comportarnos. Para Dios no valen las apariencias, Él nos dio un espejo en donde nos tenemos que mirar, a Jesús, para eso nos lo envió. Jesucristo quería ser fiel a su Padre y eso lo llevó a la cruz.

    Un abrazo para tod@s y que paséis una buena semana.




    .

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  3. Es muy bueno el testimonio del joven profesor, que nos cuenta la homilía. El se da cuenta de que estos niños "lo han aprendido, escuchado en su casa, de palabras, gestos..y les ha quedado"; me pregunto qué escuchan
    nuestros niños, chicos cristianos, en sus casas sobre Jesús, sobre la Cruz. Lo que mejor les quede será lo que vivan sus progenitores y les vaya entrando y formando en el día a día. Los niños que estuvieron en esa clase tuvieron la oportunidad de ver a su profe - dar razones de su Fe, desde su comportamiento y desde sus palabras.-
    Dice así la homilía:
    "El chico se dio cuenta que el niño no hablaba por sí mismo, sino que repetía lo que había oído en casa, y le dijo que, si fuera mayor, le respondería, pero, como era un niño, no era conveniente responderle por respeto."
    Esto me anima a hablar mas de Dios, de Jesús, del evangelio en casa , donde podemos creer que todo está dicho, y ya hemos cumplido- lo digo como padre/madre. Esto me anima a bendecir la mesa hoy nuevamente,cuando reuna a los hijos, nueras y yernos, recordándoles el Año de la Fe y rezando juntos el Credo. Y algo más saldrá. Seguro que sí; quizás de labios de algún invitado que nos sorprenda con su presencia, que es fácil que ocurra. Ya se verá.
    Porque hemos de trasmitir nuestra Fe, allí donde estemos: dando clases gratuitamente, en el trabajo, al salir de misa o en nuestras casas.
    Cuántos no saben que los cristianos, los católicos estamos celebrando en el 2012 el Año de la Fe? A cuántos se los hemos comunicado nosotros de alguna forma, gesto o palabra? Son pensamientos que comparto con vosotros, porque este testimonio me ha calado profundamente.

    Un abrazo fraterno.Es el Año de la Fe y deseo vivir la fraternidad con mayor intensidad, amigos.

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  4. Creo en Dios pero vivo como si no creyera.

    Así nos va.

    No me extraña que las personas de otras confesiones nos digan piropos del estilo de los de este niño musulmán, la verdad es que nosotros se lo ponemos muy fácil. Nos avergonzamos de confesarnos creyentes, es más, nos mofamos de los que lo dicen abiertamente.

    Hace un par de semanas le dije a una persona que tenía mucha gana de ir a Misa a una parroquia de Mieres y esa persona me contestó “jolín, a Mieres? pero qué tiene esa Misa” y debo confesar que me tuve que sobreponer para no decir una patochada y así poder salir del laberinto pero, gracias a Dios, tuve la suficiente valentía para decirle “es que a mí me gusta ir ahí, a esa Misa, lo necesito. Es cargar la pila espiritual para toda la semana”.
    Sentí orgullo porque también yo, a veces, siendo creyente, viví como si no creyera.

    He observado que estamos en el domingo 33 y eran 33 los participantes en el Cursillo, ¡qué casualidad!. Me alegro que os lo hayáis pasado tan bien.

    Un abrazo para cada un@

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  5. Jesucristo (nuestro profeta) es un ser débil, cobarde, no vale para nada, ni para defenderse de los escupitajos, ni de los azotes, ni de la cruz.
    Así piensa esta gente, yo me pregunto entonces ¿porqué ese odio, ese temor, esa persecución, hacia los cristianos; los que deseamos seguir a ese Ser tan débil, que no sirve para nada? creo que tiene poco sentido el perseguir y querer "destruir" a un personaje así, ya que no representa ningún peligro.
    ¿No será que en el fondo de todo ven que, de tanta debilidad surge una tremenda fortaleza? ¿Que Jesús, que es Dios, al humillarse de semejante manera nos ha rescatado para una Vida nueva? ¿que de esa cruz dimana una fortaleza increíble, que nos hace mas fuertes que la muerte?. Que nos da una Vida en que ya no habrá ni llanto, ni luto, ni dolor, ni muerte; ya que El que es el Amor en esencia, un amor que para nosotros es casi incomprensible, desde la cruz, en que aparentemente terminó todo, toda su predicación, su entrega hacia los mas débiles, etc. es precisamente de donde nace la Vida, porque allí sí mató todos nuestros pecados, y nos abrió un camino hacia la felicidad. Y no solo para después de la muerte física, en ese mundo nuevo; ya aquí, los que por su gracia creemos en El, en su amor, en su perdón, en su paciencia y misericordia, podemos experimentar las primicias de esa dicha, y de sentirnos amados siempre, por ese Dios que no nos deja solos nunca, y que hace lo imposible, para que todos los hombres nos amemos como hermanos.
    Recordemos que este es el principal mandamiento que Jesús nos dejó "Amaos los unos a los otros, como yo os he amado" es decir, respondiendo con amor a aquellos que nos odian, que nos rechazan, que nos hacen injusticias etc. etc. Eso exactamente es lo que ha hecho Jesús; ese "profeta bobalicón" que supo amar como nadie lo hará jamás.
    Yo me postro a sus pies y le digo: Señor, yo no soy digna de estar en tu iglesia, ni de pronunciar tu nombre, ni de tu perdón; ¡tantas veces te he sido y te soy infiel! pero espero en tu misericordia, y en que me concedas la gracia de saber amarte a pesar de todo.
    Ama y haz lo que quieras; creo que esto lo decía S. Agustín; y tiene mucho sentido. Como dice el refrán: obras son amores, y no buenas razones. El amor se nota, se ve.
    Andrés muchas muchas gracias, porque sabes contagiarnos ese amor maravilloso que sientes hacia Dios. Que El te lo premie.
    Hermanos, Que Dios nos conceda el poder amarnos de verdad los unos a los otros, y que podamos ser, esa comunidad unida por el amor.
    BENDITO SEA DIOS.

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  6. Queridos amigos,me apetece comenzar con la frase "sin novedad en La Peña", vivo una realidad magnífica en esta Parroquia acogedora, sencilla, pero con mucha profundidad en su fe y en sus obras. Nuestro querido D. Andrés está haciendo lo que más ama, sembrar la Palabra de Dios y pastorear ese rebaño que por la Providencia crece cada día más.

    Nuestro Páter tiene un camino diferente, al del joven profesor que colabora con Cáritas para formar a chicos de diversas etnias, pero en el fondo hay algunos puntos en común, los dos trabajan por el Reino de Dios, los dos trabajan para dar a conocer con obras, los caminos de la fe, los dos se arriesgan a encontrar posturas críticas sobre su trabajo, los dos tienen como modelo único, a "aquel Chico maravilloso, humilde, trabajador y extraordinario de Galilea" que nos ha seducido a tantos millones de fieles seguidores, quizás porque instintivamente, cuando hay sensibilidad, el perdedor, lleva todas las de ganar en los corazones abiertos al amor,y El es puro amor, la gran llave, que abre todas las puertas de esta vida..., y de la otra.

    Es pues para mi una excelente noticia el seguir sin novedad, todo acontece dentro de un contexto providencial, los que queremos a D. Andrés, y somos legión, valoramos el regalo que le está haciendo el Señor, y que nos está haciendo a todos, ver como una comunidad de fieles se apiña, disfruta, vive las enseñanzas de un Evangelio que siempre es actual, real, perfecto, jamás pierde la frescura de su mensaje, cuando éste se trabaja, y se elabora con humildad, sin aditivos poéticos ni cargantes, simplemente la verdad de cada día, cruda y dura, pero que llega a los corazones, los ejemplos que ilustran esta Homilía son la respuesta, a nosotros nos toca asimilar, engullir, digerir, todo lo que el Señor nos transmite a través de D. Andrés.

    Muchas gracias D. Andrés por su trabajo y feliz semana para Vd., los hermanos del blog, la Comunidad de las 11, y para los queridos feligreses de la Peña, y de todas sus parroquias mierenses.

    Aloya

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  7. Estuve el domingo en la Peña y pude observar tres detalles maravillosos de nuestro pastor:
    -le tendió la mano a la señora que acababa de hacer una de las lecturas, facilitándole bajar las escaleras del altar; con toda la naturalidad del mundo. Así es él.
    -al terminar la Misa, se entonó el "Oh María..."; él se unió al canto y espero mirando hacia la Virgen desde el lateral, antes de salir hacia la sacristía; la mayoría de los sacerdotes lo hacen.., queda para los fieles solo el resto, como un añadido.
    -una grandísima sonrisa de pronto apareció en su rostro, acabando de comenzar la misa; pensé, seguramente llegó alguien a quien quiere muchísimo: eras Tu Pablo. Lo comprobé al salir y verte allí junto a tu padre. Gracias por darnos esa alegría con tu presencia,al pater y a toda la comunidad que estábamos allí reunida.
    Simplemente gestos, sencillos, naturales; gestos que salen de la actitudes de un corazón que imita al de Jesús, y nos da la oportunidad de ser mejores aprendices. Gracias.
    Buena semana, amigos. Especialmente para Pablo.

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  8. Mucha catequesis tenemos que estudiar para dar testimonio de nuestra fe. Hasta ahora teníamos una religión heredada, pero ahora nos toca defenderla (con amor, delicadeza y valentía).

    Desde que España está abierta a otras culturas y religiones, creo que respetamos más sus costumbres, que las nuestras (Nunca nadie es profeta en su tierra).

    Cuando un católico dice que va a Misa los Domingos o a diario, o que se Confiesa con frecuencia, te miran como un bicho raro; y lo que más suele extrañar es cuando estando en Cuaresma y hay una comida que coincide en viernes, dices que guardas la abstinencia de comer carne. ¡Menuda polémica!

    Generalmente todos los que respetan a las otras religiones se echan contra ti, y encima quieren que te sientas como un EXTRATERRESTRE, pero nosotros hacemos lo que manda la Santa Madre Iglesia.

    Ahora se acerca la Navidad, me imagino que iréis observando que en los escaparates, cada vez los motivos Navideños, se van desvirtuando, el Portal del Belén, la Virgen, San José y El Niño Jesús, cada vez están en menos sitios, pero sí ponen a Papa Noel (inventado por Coca-cola), que en definitiva es San Nicolás de Bari, o bolas de nieve, muñecos de nieve, que pena.!!!!

    Quieren que terminemos celebrando la fiesta del invierno. Pero no será así.

    Ahora tenemos Cuatro semanas de preparación para la Navidad: El ADVIENTO, y es para que grandes y pequeños no nos olvidemos de lo principal de la Navidad: El Nacimiento del NIÑO DIOS.

    Espero que este año cantemos muchos villancicos, otra tradición que también se está perdiendo.

    Feliz semana

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  9. Mucha catequesis tenemos que estudiar para dar testimonio de nuestra fe. Hasta ahora teníamos una religión heredada, pero ahora nos toca defenderla (con amor, delicadeza y valentía).

    Desde que España está abierta a otras culturas y religiones, creo que respetamos más sus costumbres, que las nuestras (Nunca nadie es profeta en su tierra).

    Cuando un católico dice que va a Misa los Domingos o a diario, o que se Confiesa con frecuencia, te miran como un bicho raro; y lo que más suele extrañar es cuando estando en Cuaresma y hay una comida que coincide en viernes, dices que guardas la abstinencia de comer carne. ¡Menuda polémica!

    Generalmente todos los que respetan a las otras religiones se echan contra ti, y encima quieren que te sientas como un EXTRATERRESTRE, pero nosotros hacemos lo que manda la Santa Madre Iglesia.

    Ahora se acerca la Navidad, me imagino que iréis observando que en los escaparates, cada vez los motivos Navideños, se van desvirtuando, el Portal del Belén, la Virgen, San José y El Niño Jesús, cada vez están en menos sitios, pero sí ponen a Papa Noel (inventado por Coca-cola), que en definitiva es San Nicolás de Bari, o bolas de nieve, muñecos de nieve, que pena.!!!!

    Quieren que terminemos celebrando la fiesta del invierno. Pero no será así.

    Ahora tenemos Cuatro semanas de preparación para la Navidad: El ADVIENTO, y es para que grandes y pequeños no nos olvidemos de lo principal de la Navidad: El Nacimiento del NIÑO DIOS.

    Espero que este año cantemos muchos villancicos, otra tradición que también se está perdiendo.

    Feliz semana

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