jueves, 6 de julio de 2017

Domingo XIV del Tiempo Ordinario (A)



9-7-17                          DOMINGO XIV TIEMPO ORDINARIO (A)

Homilía en vídeo
Homilía de audio
Queridos hermanos:
            El evangelio de hoy es precioso y sólo de los labios de Dios pudo haber salido. Se podía comentar cada frase, o más bien, saborear cada frase. En esta homilía de hoy cogeré dos de éstas para saborearlas:
            - Dice Jesús: “Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, así te ha parecido mejor”. Veamos un ejemplo de esto a través de un escrito que recibí de Internet hace un tiempo. Lo escribió un niño de 8 años de edad, Danny Dutton de Chula Vista, California, como tarea para una de sus clases de tercer grado. Debía de realizar una redacción cuyo título era: ‘Explica a Dios’. Sería difícil hacerlo mejor; helo aquí:
El principal trabajo de Dios es el hacer la gente. Los hace para reemplazar a todos los que mueren, para que así siempre haya suficientes personas que cuiden este mundo. Él no hace gentes mayores. Creo que los pequeños deben ser más fáciles de hacer. De esa forma no pierde su valioso tiempo enseñándolos a caminar y a hablar. Eso se lo deja a las mamás y a los papás.
El segundo trabajo más importante de Dios es el escuchar nuestras oraciones. Un montón de tiempo se le va en esto, ya que las personas rezan a todas horas y no sólo antes de acostarse. Dios no tiene tiempo de escuchar la Radio o ver la TV. Dios ve todo y escucha todo y está en todos lados, por eso siempre está muy ocupado. Por eso no debemos ocupar su tiempo pidiéndole cosas que papá y mamá dicen que no podemos tener.
Los ateos son personas que no creen en Dios. No creo que haya muchos en Chula Vista. Por lo menos, no hay ninguno que venga a Misa.
Jesús es hijo de Dios y hace todo el trabajo pesado: como caminar sobre el agua y realizar milagros. La gente finalmente se cansó de su predicación y lo crucificaron. Pero Él era bueno y amable como su Padre  y le dijo a su Padre que los perdonara, porque ellos no sabían lo que hacían y Dios dijo ‘O.K.’ Su Padre (Dios) agradeció todo lo que él hizo y todo su trabajo en la tierra y le dijo que ya no tenía que volver para acá nunca más. Que se podía quedar en el cielo. Y así lo hizo. Y ahora le ayuda a su Papá escuchando nuestras oraciones y viendo cosas que son importantes para que Dios las resuelva y cuales puede resolver él sin molestar a Dios.
Se puede rezar a cualquier hora y ten por seguro que te ayudarán, ya que entre ellos (Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo) arreglaron las cosas de tal forma que siempre uno está de guardia.
Debemos ir a la iglesia todos los domingos, porque eso hace feliz a Dios y, si hay alguien a quien debes hacer feliz, es a Dios. No faltes a la iglesia sólo porque piensas que hay cosas más divertidas que hacer, como ir a la playa. Eso está mal. Además, de todos modos, aquí en California el sol no sale en la playa hasta mediodía.
Si no crees en Dios, aparte de ser un ateo, te la pasarás muy solo, porque tus papis no pueden estar siempre contigo, como cuando estás en el campo, pero Dios sí puede. Es bueno saber que Él está junto a ti en esos lugares obscuros que asustan o cuando los niños grandes te tiran al agua muy profunda y no sabes nadar.
Pero.... no sólo debes pensar en las cosas que Dios puede hacer para ti. Me imagino que Dios me puso aquí y me puede llevar con Él cuando quiera. Y... por eso creo en Dios”.
            - Dice Jesús: “Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón”. La soberbia se opone a la humildad y es el primer-mayor pecado que tenemos los hombres y de él nacen todos los demás:
La soberbia consiste en ponernos nosotros como centro de todo y de todos, en querer todo para nosotros. Nosotros podemos hacer lo que nos venga en gana, cuando nos venga en gana y donde nos venga en gana, sin atender a las necesidades y creencias de los demás.
Así, soy soberbio cuando me alaban y "engordo" con ello.
Cuando me critican con razón o sin ella, cuando me difaman y yo me revuelvo como una víbora y no soy capaz de perdonar y contesto hablando mal de los que hablaron mal de mí; eso es soberbia.
Cuando hablan bien de otro y yo siento envidia de ello, eso es soberbia.
Cuando yo hago cosas o dejo de hacer cosas por el que dirán o para que los demás me vean y no las hago sola­mente por Dios, eso es soberbia.
Cuando trato de justificarme ante otras personas por lo que he hecho o le echo las culpas a otro, tanto exterior como inte­riormente, eso es soberbia.
Cuando tengo pensamientos en los que yo me invento historias con las que yo quedo de vencedor, rico, guapo, listo, etc., eso es soberbia.
Cuando intento hacer algo bien por mis propias fuerzas y no me apoyo en Dios, eso es soberbia.
Si eso que quiero hacer me sale bien y me recreo en lo que he hecho, eso es soberbia.
Si eso que quiero hacer me sale mal y me insulto a mí mismo o me desprestigio a mí mismo, eso es soberbia.
¿Qué es la humildad? La humildad es Cristo: "Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón". Cristo es el ejemplo de humildad al que tenemos que imitar; o mejor dicho, he de dejar que Cristo entre en mí para que Él sea humilde en mí, porque yo soy radicalmente soberbio y por mis propias fuerzas nunca lograré la humildad.
Humildad es reconocerse pobre, limitado, necesitado de los demás y de Dios. Humildad es aceptar en todo momento la voluntad del Padre. En cierta ocasión leí una entrevista que hicieron a un ciego diabético brasileño. Él era muy creyente y todo lo veía desde este prisma. Decía así en su entrevista: ‘Soy diabético gracias a Dios, porque yo no sé lo que quiero y Él sabe lo que es bueno para mí’. ¿A que es duro esto?
CRISTO SIENDO DIOS, SE HIZO HOMBRE. SIENDO INMORTAL MURIO EN UNA CRUZ COMO UN LADRON Y ASESINO. Imitemos su humildad y así alcanzaremos a Dios y seremos enaltecidos por Él.

4 comentarios:

  1. Que grande es ser humilde.Porque es ponerse teniendo de todo,a la misma altura del que no tiene nada o poco.Esta semana,le estoy dando vueltas a la cabeza,porque el otro día vi algo muy triste.Un matrimonio que lo tenía todo,dinero,vacaciones,vestidos de lujo.Y de momento zas,enfermos,mal vestidos,y los que le hacían la reverencia,ahora se esconden,porque les dan la paliza y son unos pobres desgraciados.A mi no me conocen,yo no era de su nivel social,pero ahora es cuando yo debo acercarme,por qué?,porque soy cristiana y tenemos que estar con los que sufren,por la causa que sea.
    soberbia lo soy,que critico también,no soy santa,y siempre le pido a Dios,que me haga un corazón más bueno. Tenemos que ser cercanos,humildes y tiernos,que se nos note de parte de quién vamos. Me gustaría conoceros a tod@s,poder charlar,y oír una misa juntos,y después tomar un café.Un abrazo inmenso,y que Jesús nos llene el corazón de humildad.

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  2. Querido cura de Tapia,
    Precioso el relato del niño explicando qué es Dios. Enternece esa claridad de ideas y esa seguridad en que Dios sabe lo que necesitamos por eso habla para los humildes y los limpios de corazón.
    Cuánta energía gastamos pensando en mi, para mi, conmigo y queriendo ver las cosas solamente con nuestros ojos. Dejémosle hacer, El sabe.
    Gracias por tu trabajo.
    Feliz semana y un abrazo para cada un@

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  3. Al terminar de oir su homilia no he tenido mas remedio que dar gracias a Dios por habernos dado este Parroco que tan bien nos explica su palabra,que nos levanta el animo y en definitiva nos ayuda a acercarnos a Dios y a convertirnos, muchas gracias

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  4. Estupenda la homilía, y estupenda la redacción sobre Dios de ese pequeño, que lo ha descrito tan bien.
    Tengo muy claro que para ir al encuentro de Dios, es necesario acudir con la humildad de saber que le necesito, y que solo El me puede ayudar. Soy consciente de que todo lo que dices sobre la soberbia, brota en mi interior, es por eso que cuando me acerco a la oración, lo primero que hago es pedir al Señor que se apiade de mi; que me conceda su gracia y .esa pequeñez, esa pobreza necesaria para que El pueda actuar. También diré que no me destruye la certeza de ser pecadora, pués muy bien sé que a pesar de todo Dios me ama profundamente tal y como soy, que me mira con misericordia y ternura, y extiende su mano para levantarme cuando caigo, y ayudarme a seguir adelante.
    Muchas gracias a todos. Muchas gracias a D.Andres por esa total entrega; el Señor le dará el ciento por uno según lo prometido. Alabado sea Dios

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